¿Quién siente realmente el impacto de las catástrofes? ¿Son los responsables políticos, las agencias de ayuda internacional o los gobiernos? No, son las comunidades cuyos hogares han sido arrasados por las inundaciones. Son las familias que se han visto obligadas a huir a causa de los conflictos.
Movimiento de localización para un liderazgo resistente
Quienes están en primera línea de la catástrofe comprenden mejor que nadie su capacidad de adaptación para mitigar sus riesgos. Por eso, cuando tratamos de aumentar la resiliencia, debemos buscar, escuchar y dar prioridad a sus voces.
GNDR defiende un movimiento de localización que permita a las comunidades hacerse cargo de sus estrategias de resiliencia. Esto implica aumentar sus conocimientos, habilidades, acceso a la financiación y capacidad para influir colectivamente en la política nacional e internacional.
El camino hacia un auténtico liderazgo local está claro: debemos darle la vuelta al pensamiento global jerárquico tradicional. La localización no se producirá a menos que la sociedad civil y las comunidades a las que sirve tengan el espacio y la capacidad para liderar.
Una perspectiva desde Sudán del Sur
Al potenciar los conocimientos y el liderazgo locales, podemos satisfacer las necesidades específicas de las comunidades más amenazadas. En Sudán del Sur, años de conflicto, inundaciones y sequías han desplazado a millones de personas, muchas de las cuales buscan refugio en zonas urbanas ya superpobladas y marginadas.
Root of Generations, miembro de GNDR, es una organización local de la sociedad civil que trabaja con comunidades de acogida y desplazadas en la capital, Juba. Como parte de nuestro proyecto Making Displacement Safer, financiado por la Oficina de Asistencia Humanitaria de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), reunieron a comunidades en riesgo con partes interesadas locales, incluidos funcionarios del gobierno, académicos y empresas locales.
Ejemplo de resiliencia comunitaria
Como grupo, identificaron sus riesgos y trabajaron juntos para crear las soluciones que realmente cambiarían sus vidas. Mediante este enfoque ascendente y colaborativo, señalaron la falta de ingresos sostenibles como la mayor amenaza. ¿La solución? Que la propia comunidad creara oportunidades de negocio y formación que dieran a los desplazados la oportunidad de reconstruir sus medios de vida.
Reinvirtieron los beneficios sobrantes en formar a más grupos para que el impacto de este proyecto pudiera crecer. Juntas, las comunidades más marginadas dirigieron, crearon y se beneficiaron activamente de los esfuerzos de resiliencia.
Colaboración para la sostenibilidad
Aumentar la resiliencia a nivel local requiere asociaciones significativas entre las comunidades, las autoridades locales y las organizaciones de la sociedad civil. Proyectos como Un desplazamiento más seguro en Sudán del Sur ponen de relieve la importancia de implicar a un amplio grupo de partes interesadas.
Empoderando a los líderes locales y fomentando la inclusión, podemos crear comunidades sostenibles, adaptables y resilientes, capaces de superar los riesgos para sus vidas y sus medios de subsistencia. Este enfoque no solo aborda los peligros inmediatos a los que se enfrentan las comunidades, sino que sienta las bases para su desarrollo sostenible, su prosperidad y su seguridad.