Libro de recetas para que el desplazamiento sea más seguro
Introducción
En 2022, más de 70 millones de personas en todo el mundo vivían en situación de desplazamiento interno, obligadas por catástrofes o conflictos a abandonar sus hogares [1].
Mientras que algunas personas pueden volver a casa pocos días después de una evacuación, otras pueden no poder regresar en meses, años o nunca, ya que sus casas han quedado destruidas o siguen siendo inseguras.
Muchos desplazados acaban en asentamientos informales en zonas urbanas. Esto les expone a otros riesgos, sobre todo si se asientan en zonas propensas a los peligros y desfavorecidas de las ciudades y sus periferias. Los desplazados pueden enfrentarse a muchos retos. Pueden desconocer los riesgos de su nueva ubicación; no tener acceso a los servicios básicos si no están formalmente reconocidos; carecer de redes sociales sólidas; estar excluidos de la toma de decisiones; enfrentarse a la discriminación; enfrentarse a barreras lingüísticas y culturales; y no poder acceder a las oportunidades económicas de su nueva ubicación. Estos retos relacionados con el desplazamiento aumentan su riesgo de convertirse en desplazados una segunda o múltiples veces.
A medida que aumenta el riesgo de catástrofes, se prevé que también aumenten los desplazamientos, principalmente en las zonas urbanas. Este recetario identifica "ingredientes" y "recetas" que han tenido éxito a la hora de promover desplazamientos más seguros en entornos urbanos, aumentar la resiliencia y evitar los desplazamientos.
"Aún no tienen esperanzas de volver a casa. Las dificultades a las que se enfrentan incluyen la falta de asistencia sanitaria, niños que ya no pueden estudiar, existencia de violencia sexual, falta de agua potable y mucho más. Además, el cambio climático al que nos enfrentamos hoy en día está causando enormes daños en la comunidad. El reto es que todas estas personas, ya sean víctimas de la guerra, de las inundaciones o de los corrimientos de tierra -o de todo-, no cuentan con el apoyo gubernamental adecuado".
David, Dynamique Des Jeunes Pour La Paix Et Le Développement Intégral (DJPDI), República Democrática del Congo
Cómo hicimos este libro de cocina
La Red Global de Organizaciones de la Sociedad Civil para la Reducción de Desastres (GNDR) es la mayor red de organizaciones de la sociedad civil que trabajan juntas para reforzar la resiliencia de las comunidades más expuestas al riesgo de desastres. GNDR cuenta con más de 1.700 miembros en 130 países, muchos de los cuales han compartido sus conocimientos y buenas prácticas en la serie de guías "cookbook" [2]. La serie contiene factores de éxito -enunciados como "ingredientes"- y estudios de casos -enunciados como "recetas"- sobre la reducción eficaz del riesgo de desastres (RRD).
Este libro de cocina comparte las buenas prácticas y las lecciones aprendidas por los miembros de GNDR a lo largo de los tres años del proyecto Making Displacement Safer (MDS), financiado por la Oficina de Ayuda Humanitaria de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID-BHA). El recetario hace referencia al trabajo de 11 miembros que llevaron a cabo actividades dentro del proyecto [3].
El MDS se basa en soluciones de RRD dirigidas localmente para las poblaciones desplazadas en zonas urbanas. El objetivo del MDS es contribuir a la reducción sustancial de las pérdidas por riesgo de desastres en vidas, medios de subsistencia y bienes para las poblaciones desplazadas en zonas urbanas, contribuyendo así a los objetivos del Marco de Sendai. El MDS pretendía lograr tres resultados principales:
- Una mayor comprensión de los problemas de riesgo de catástrofe únicos para las poblaciones desplazadas en las zonas urbanas
- Un mayor número de enfoques innovadores para reducir la vulnerabilidad de las poblaciones desplazadas en las zonas urbanas
- Los enfoques y las funciones de las partes interesadas para reducir la vulnerabilidad de las poblaciones desplazadas en las zonas urbanas están institucionalizados en los sistemas nacionales e internacionales
Aprendizaje compartido dentro de la red
Además de las 11 organizaciones que trabajaron en la implementación de MDS, GNDR encuestó a sus miembros sobre sus iniciativas para reducir el riesgo de desastres para las poblaciones desplazadas en zonas urbanas. A partir de estas experiencias, se identificaron una serie de ingredientes clave que se debatieron en talleres regionales en África, Asia y América Latina y el Caribe, en julio y agosto de 2023, en los que participaron un total de 28 miembros [4]. A continuación, se invitó a los miembros de GNDR a seguir reflexionando sobre los factores que contribuyen a la reducción del riesgo entre las poblaciones desplazadas. Los miembros recomendaron ingredientes y enfoques específicos para añadir al borrador. También aportaron sus conocimientos y experiencia en el apoyo a personas desplazadas, que se han integrado en los enfoques, ingredientes, terminología y estudios de caso de este recetario.
A través de la encuesta y durante los talleres, los miembros de GNDR destacaron los retos a los que se enfrentan las poblaciones desplazadas y el trabajo de sus organizaciones de la sociedad civil para abordar estos retos y mejorar la resiliencia de las comunidades. Entre los problemas concretos se encuentran el acceso a la vivienda y a los suministros y servicios básicos (por ejemplo, alimentos, agua, atención sanitaria, educación), la falta de infraestructuras, la exposición a riesgos naturales y la pobreza.
Las ocho recetas de este recetario ofrecen ejemplos de cómo los miembros de GNDR están abordando el riesgo de desplazamiento en las zonas urbanas y ponen de relieve el importante papel de las OSC a la hora de trabajar con las comunidades desplazadas para desarrollar e implementar intervenciones, así como para abogar ante los gobiernos locales y nacionales.
Objetivos y alcance del recetario
El objetivo del recetario es reforzar las capacidades de las organizaciones de la sociedad civil para afrontar los retos del riesgo de catástrofes en contextos de desplazamiento urbano.
La mayoría de las recetas de este recetario son ejemplos de desplazamientos provocados por catástrofes, sobre todo meteorológicas y climáticas. El recetario también incluye experiencias de comunidades desplazadas por conflictos y por necesidades socioeconómicas, junto con la amenaza del riesgo de catástrofes. Mientras que otros recursos destacan diferentes causas y terminología para diferentes tipos de movilidad humana, en este recetario, basándose en su contexto específico, se consideran desplazados.
La mayoría de las comunidades descritas en las recetas se asentaron en zonas urbanas, como ciudades o en la periferia de las ciudades. El recetario incluye historias de comunidades desplazadas en entornos más rurales en las que los enfoques utilizados por los miembros de GNDR para atender sus necesidades eran aplicables en múltiples contextos.
Para que el desplazamiento sea más seguro en las zonas urbanas se requieren muchas habilidades y capacidades que las organizaciones comunitarias ya tienen en el fomento de la resiliencia y en la defensa de las comunidades que se enfrentan a riesgos de desastres. Este recetario pretende animar a los miembros de GNDR y a otros actores que trabajan con poblaciones desplazadas a que utilicen sus capacidades para ayudar a sus comunidades a evitar el desplazamiento y apoyar eficazmente a las ya desplazadas. Para ello, el recetario promueve un enfoque localizado y basado en el riesgo, y fomenta la participación de la comunidad para comprender las preocupaciones de las personas desplazadas y trabajar con otras partes interesadas para responder en consecuencia. Se espera que el recetario pueda ser también una herramienta para que los miembros influyan en las políticas y prácticas nacionales en materia de desplazamiento abogando por la reproducción de los ingredientes presentados.
Panorama de los desplazamientos por catástrofes en entornos urbanos
Cuando las personas son desplazadas de sus hogares, pueden instalarse en campamentos oficiales, pero la mayoría se queda con familias de acogida, en viviendas alquiladas o se asienta de manera informal en terrenos disponibles. Aunque se desconoce el porcentaje de desplazados que se asientan en zonas urbanas, hay consenso en que, en un mundo cada vez más urbanizado, la mayoría de los desplazados se asientan en centros urbanos [5].
Cuando el acceso a lugares de reubicación u otros servicios formales es limitado, los desplazados pueden verse obligados a buscar refugio en asentamientos marginales o informales desatendidos en zonas de alto riesgo, como laderas y cuencas hidrográficas, donde los ecosistemas pueden haberse degradado o degradarse a causa del asentamiento, lo que reduce la capacidad de los ecosistemas para actuar como amortiguadores naturales [6]. Como los asentamientos informales no suelen beneficiarse de los servicios de agua y saneamiento de las autoridades urbanas, los cursos de agua pueden contaminarse, lo que aumenta los riesgos para la salud. Como recién llegados, es probable que los desplazados desconozcan los peligros a los que están expuestos en su nuevo entorno y que queden excluidos de la RRD y de otros procesos de intercambio de información, lo que aumenta su riesgo de catástrofe y la probabilidad de volver a ser desplazados.
Una persona o familia desplazada puede enfrentarse a una serie de retos al asentarse en una zona urbana, como el aislamiento, la exclusión, la discriminación o la violencia como consecuencia de las diferencias culturales y los enfrentamientos con la comunidad de acogida, sobre todo en Estados frágiles. Además, las poblaciones desplazadas pueden carecer de la documentación necesaria para acceder a la tierra, a servicios como la educación o la sanidad, y a prestaciones económicas como las ayudas sociales. También pueden enfrentarse a problemas de salud mental, violencia de género, matrimonios forzados y conflictos intercomunitarios, entre otros.
A menudo, estos retos permanecen sin resolver durante varios años, ya que los mandatos de respuesta a catástrofes suelen terminar cuando se declara finalizada la fase de emergencia, se interrumpe la ayuda humanitaria y antes de que las personas desplazadas hayan encontrado una solución duradera a su desplazamiento.
Los resultados de las encuestas y del proyecto MDS corroboraron estas conclusiones y se recogieron en el Informe Global sobre Desplazamiento Forzado como sigue:
- La mayoría de los desplazados que viven en zonas urbanas siguen viéndose afectados por múltiples catástrofes.
- Rara vez se consulta a los desplazados para diseñar políticas, planes y actividades destinadas a reducir el riesgo de catástrofes.
- Los desplazados no tienen acceso a recursos financieros para reducir el riesgo de catástrofes
- Los desplazados rara vez tienen acceso a información oportuna que les ayude a reducir riesgos
- Los desplazados suelen quedar excluidos de la toma de decisiones
Conclusiones y recomendaciones de los procesos participativos del MDS
Capítulo siguienteLibro de recetas para que el desplazamiento sea más seguro
Ir al inicioNotas a pie de página
- En 2022, el Observatorio de Desplazamientos Internos (IDMC) informó de que 32,6 millones de nuevos desplazamientos internos en todo el mundo fueron provocados por desastres, además de los 28,3 desplazamientos resultantes de conflictos. A 31 de diciembre de 2022, el Informe Mundial sobre Desplazamiento Interno 2023 del IDMC constató que el número de personas que viven en situación de desplazamiento interno (incluidos los desplazamientos nuevos y continuados) ha alcanzado la cifra récord de 71,1 millones.
- Más información sobre la afiliación a GNDR
- En Desplazamientos más seguros fue ejecutado por socios de GNDR en 11 países: Bangladesh, El Salvador, Honduras, Indonesia, Iraq, Nepal, Níger, República del Congo, Ruanda, Sudán del Sur y Sri Lanka.
- Véase la lista de participantes en el taller en la sección de agradecimientos de la versión descargable en PDF del libro de cocina Making Displacement Safer Cookbook.
- Para más información, véase Desplazamiento interno en un mundo cada vez más urbanizadopresentado al Grupo de Alto Nivel sobre Desplazamiento Interno del Secretario General de las Naciones Unidas por JIPS, ONU Hábitat y el IIED.
- Véase UNDRR Displacement Addendum to the Disaster Resilience Scorecard for Cities.
Proyecto financiado por
Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional
Nuestro proyecto Hacer más seguro el desplazamiento proyecto es posible gracias al apoyo del pueblo estadounidense a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) - Oficina de Asistencia Humanitaria. El contenido relacionado con este proyecto en nuestro sitio web ha sido posible gracias al apoyo de la USAID. Todo el contenido es responsabilidad exclusiva de GNDR y no refleja necesariamente las opiniones de la USAID.
Visite su sitio web