Fase III: Actuar y gestionar
Etapa 7: Actuación con las comunidades de mayor riesgo
Implementar las acciones e intervenciones necesarias que las comunidades han decidido. Hay que tener en cuenta los diferentes modos de ejecución de las acciones y otros aspectos que intervienen en la realización de las mismas (como la búsqueda de coherencia con otros proyectos, esquemas y planes relevantes).
Etapa 8: Rendir cuentas a las comunidades de mayor riesgo y aprender con ellas
Aunque está documentada como la octava etapa, la rendición de cuentas y el aprendizaje con las comunidades más expuestas deben tener lugar a lo largo de todo el proceso, así como al final. A medida que se vaya generando un impulso en torno a lo que está ocurriendo, se espera que más partes interesadas se unan al proceso y que el aprendizaje compartido -a través de procesos de revisión formales e informales- pueda conducir a un progreso sostenido. Los procesos de rendición de cuentas deben movilizar un uso responsable del poder por parte de los titulares de obligaciones y las partes interesadas responsables del desarrollo.
Etapa 9: Repetir y reforzar
La planificación del desarrollo basada en el riesgo no es una actividad única. Su éxito se basa en compartir el aprendizaje, reforzar la acción y revisar el proceso para mejorar el desarrollo. Esto se debe a que los riesgos y los factores de riesgo son dinámicos, al igual que el desarrollo y el crecimiento. Las OSC y las comunidades pueden mejorar o ampliar la escala de su proceso de planificación del desarrollo basado en el riesgo en el siguiente ciclo, a partir de los conocimientos adquiridos por la acción y el aprendizaje. GNDR espera que, gracias al éxito de un primer compromiso informado sobre el riesgo, las comunidades se vean capacitadas para abordar cuestiones más complejas, riesgos mayores o barreras más poderosas.